16 de octubre de 2007

Recuento

Uno

Esta noche no puedo dormir: mañana es mi último día en Irapuato, mi última noche en el valle abajeño. Hoy fui a Guanajuato y compré un libro: Antología poética de Autores de Guanajuato, reunión de dos generaciones, según el antologista.

Dos

También, aparte de las resonancias poéticas, están las imágenes. La vida se convierte en imagen y la imagen en voz, dice Octavio Paz. La voz recrea la imagen y la imagen se convierte en vida, ilumina. Cada minuto es sagrado, es el centro del mundo éste instante, todo es sacro. He llorado esta noche despeñandome por las comisuras de los sueños, por superar mis circunstancias.

Tres

El domingo abracé fuerte a mi sobrina Briseida y lloré al verla nombrarme, al verla buscándome. Otro año más que me perderé su crecimiento. Hice todo por hacerle recordar mi voz y ahora, cuando ella me reconoce, su instante queda sólo en imagen.

Cuatro

Hoy hicieron unos ricos tamales, me comí dos de cacahuate. Hoy salí con una chica, América, e igual que nuestro continente, posee grandes valles y accidentes geográficos, trémulas bahías que nada le envidian al Caribe con cordilleras ardientes hacia el norte.

Cinco

Hoy estuve con un amigo y fuimos a comprar un libro.

Seis

Hoy le hablé a la chica de la que me he enamorado, Yazmín, no me importa nombrarla, pues deseo tener a mi lado sus arabescos pétalos.

Siete

Voces, ojos, labios, no puedo dormir. Alcanzando la imagen la vida tengo que retirarme y volver la vida imagen para mantenerme antes de mi viaje de vuelta, viaje que yo he decidido con total soberanía.

Es extraño y portentoso saberse vivo.